Un total de 22 presuntos delincuentes murieron en enfrentamientos con las Fuerzas Armadas mexicanas tras una operación de 15 días en cuatro estados del norte, en la que las autoridades decomisaron armas y drogas y liberaron a 14 secuestrados, informó hoy la Secretaría de la Defensa Nacional.
Del 10 al 24 de septiembre la Secretaría de la Defensa Nacional (Sedena) puso en marcha la segunda fase de la operación "Escorpión", en la que participaron soldados del Ejército y de la Fuerza Aérea.
La misión tenía como meta "acotar de manera contundente las actividades de los grupos delincuenciales que tienen presencia en los estados de Nuevo León, Tamaulipas, Coahuila y San Luis Potosí", manifestó el organismo en un comunicado.
En esos estados del noreste de México, una de las zonas más violentas del país, operan principalmente los cárteles de las drogas de Los Zetas y del Golfo.
La dependencia indicó que durante las operaciones logró liberar a 14 personas que estaban secuestradas y detuvo a 307 presuntos delincuentes.
Los militares sostuvieron 13 enfrentamientos con grupos criminales, en los cuales murieron 22 presuntos delincuentes y tres soldados resultaron heridos.
Además, las fuerzas castrenses decomisaron 4.8 toneladas y dos mil 99 dosis individuales de mariguana, 6.9 kilogramos y 474 dosis individuales de cocaína, 2.3 kilos y 357 dosis de cocaína en piedra, y 202 dosis de cristal.
Asimismo, se incautaron de 459 armas largas y 118 cortas, 108 mil cartuchos de diferentes calibres, 3 mil 237 cargadores, 84 granadas, 272 vehículos (nueve de ellos con blindaje artesanal), nueve embarcaciones, 292 mil 191 dólares en efectivo, y 7.2 millones de pesos (unos 526 mil dólares).
La dependencia destacó también la detención de dos personas quienes presuntamente participaron en el atentado incendiario contra el Casino Royale de la ciudad de Monterrey -capital de Nuevo León, donde murieron 52 personas el pasado 25 de agosto.
Fuente: El Universal
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