La Policía Nacional ha detenido a una mujer de unos 50 años, identificada como A.M.P., como sospechosa de la muerte la mujer de 53 años de edad cuyo cuerpo ha sido hallado en su propio domicilio en el barrio de Bellavista de Sevilla.
El arresto ha tenido lugar en la capital hispalense, concretamente en el entorno de las Tres Mil Viviendas, horas después del macabro hallazgo, motivado por la entrada de los agentes en el piso, después de que una sobrina de la difunta alertase de que hacía varios días que no se la veía. Al entrar, los policías localizaron el cadáver de la mujer en el interior del inmueble.
Una de las hipótesis que baraja la Policía es que el fallecimiento se produjera como consecuencia de un juego sexual de la pareja, pues la víctima ha aparecido desnuda y con las manos atadas en su cama. Estrangulada, no degollada, como apuntaban las primeras informaciones.
Las fuentes consultadas por ELMUNDO.es de Andalucía han precisado, incluso, que el estrangulamiento de la víctima pudo efectuarse con una media o un calcetín.
Desde el comienzo de la investigación, la Policía tuvo en su diana a la pareja de la víctima, una mujer llamada Amparo, que algunos vecinos, incluso, situarían en el piso este lunes, cuando ya se habría producido el homicidio.
Los testimonios de los vecinos las describen reservadas y correctas en el trato en la calle, si bien también como protagonistas de sonadas disputas. Estas fuentes afirman que el lunes 26 de diciembre vieron por el barrio a la compañera de la asesinada, que es coja y a la que no se le conoce un empleo, y desde entonces nadie ha vuelto a saber nada más de ella.
El vecino de la casa de al lado de la fallecida, José Manuel Santana, por su parte, también ha apuntado que las discusiones entre ambas mujeres eran frecuentes.
El Juzgado de Instrucción número 18 de Sevilla, que lleva el caso, ha decretado el secreto de sumario.
Este vecino ha agregado que la mujer muerta era "una persona trabajadora", y ha apuntado que en torno a las dos de la madrugada de la Nochebuena fue la última vez que escuchó a las mujeres.
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