La tranquila pedanía valenciana de Horno de Alcedo fue ayer escenario de un atraco en el que el escolta del concejal Vicente Aleixandre abrió fuego con su arma reglamentaria para intentar frenar la huida de los ladrones. Al cierre de esta edición, agentes de la Guardia Civil trataban de localizar a los maleantes.
El altercado se produjo sobre las 18.45 horas, en la calle Azagador de la Torre, en el polígono industrial de la pedanía valenciana. En ese momento, Aleixandre, concejal de Pedanías y de Devesa-Albufera, acababa de salir de un almacén de productos agrarios «que linda pared con la nave de venta de bebidas» en la que se produjo el robo. El coche oficial aguardaba al edil, que se dirigía a una reunión prevista a las siete de la tarde con la alcaldesa pedanea de Horno de Alcedo y varias asociaciones.
Aleixandre se disponía a entrar en el coche cuando vio salir a «dos chavales encapuchados que salían a toda prisa del almacén. Uno empuñaba un cuchillo de grandes dimensiones y el otro, algo negro que parecía una pistola», según describe. Varios empleados del local asaltado «salieron en persecución de los ladrones» mientras gritaban: «¡Un atraco, un atraco!».
El escolta del concejal no se lo pensó dos veces. Desenfundó su arma reglamentaria y dio el alto varias veces a los delincuentes, que hicieron caso omiso y se introdujeron en un Peugeot 206 de color gris que previamente habían estacionado frente al almacén para asegurarse una rápida huida después del robo.
En medio de la confusión, los responsables del establecimiento se colocaron frente al vehículo para impedir la fuga. Hasta el propio concejal Aleixandre abandonó el vehículo oficial y gritó a los ladrones para que pararan. El edil recuerda cómo alguien «lanzó una caja de Schweppes contra la luna del Peugeot, que se rompió».
Los asaltantes hicieron varios amagos de atropellar a los testigos, momento en que el escolta disparó dos veces a las ruedas para protegerles e impedir la huida. Pero al final los delincuentes encontraron el modo de sortear a la multitud congregada y se escaparon por la carretera.
El propio concejal avisó de inmediato a la Guardia Civil y facilitó los datos del vehículo y la descripción de los ladrones. Al parecer, se apoderaron del dinero de una caja registradora tras amenazar con armas a los empleados del almacén. Al cierre de esta edición todavía no habían sido localizados.
Fuente: Las provincias.es
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