El primero en ser detenido fue el marido de la fallecida, un hombre de nacionalidad cubana, que se encuentra en prisión desde mediados de octubre por orden del juez de Sagunt que instruye el sumario desde el hallazgo del cadáver. Los restantes acusados fueron arrestados con posterioridad. Los últimos tres, de hecho, lo fueron el pasado lunes en distintos en Valencia.
La víctima fue identificada como María José M. J., española de origen gallego, aunque domiciliada en Valencia. La investigación ha demostrado que la mujer viajó en julio pasado a El Salvador como mula, esto es, para transportar en su cuerpo cocaína de regreso a España.
Al parecer, cuando desembarcó en el aeropuerto de Barajas, en Madrid, comenzó a sentirse indispuesta, pero ni su marido, ni el resto de presuntos implicados en la trama le procuraron asistencia médica, ya que no consta su ingreso ni atención en ninguna consulta, ni en ningún hospital. Su estado se fue deteriorando cada vez más y, cuando falleció, abandonaron su cuerpo detrás de unos matorrales, junto a la rotonda desde la que se reincorporan los vehículos a la autovía, una vez rebasada el área de descanso.
Homicidio por omisión
El cadáver de la víctima fue encontrado el 17 de agosto por un conductor que paró a la orilla de la carretera y se bajó para orinar. Según la autopsia, la muerte se había producido al menos tres semanas antes, aunque el hallazgo de restos de cocaína en el estómago llevó a los médicos a determinar que esa circunstancia, junto con el fortísimo calor de principios del pasado agosto, había acelerado el proceso de putrefacción.
En principio, los detenidos han sido acusados de un delito de homicidio por omisión, aunque en su declaración han mantenido, al menos algunos de ellos, que la mujer murió cuando la trasladaban en el coche a un centro médico en un municipio de Castelló, a cuya puerta pretendían dejarla para que recibiese asistencia.
La víctima fue identificada como María José M. J., española de origen gallego, aunque domiciliada en Valencia. La investigación ha demostrado que la mujer viajó en julio pasado a El Salvador como mula, esto es, para transportar en su cuerpo cocaína de regreso a España.
Al parecer, cuando desembarcó en el aeropuerto de Barajas, en Madrid, comenzó a sentirse indispuesta, pero ni su marido, ni el resto de presuntos implicados en la trama le procuraron asistencia médica, ya que no consta su ingreso ni atención en ninguna consulta, ni en ningún hospital. Su estado se fue deteriorando cada vez más y, cuando falleció, abandonaron su cuerpo detrás de unos matorrales, junto a la rotonda desde la que se reincorporan los vehículos a la autovía, una vez rebasada el área de descanso.
Homicidio por omisión
El cadáver de la víctima fue encontrado el 17 de agosto por un conductor que paró a la orilla de la carretera y se bajó para orinar. Según la autopsia, la muerte se había producido al menos tres semanas antes, aunque el hallazgo de restos de cocaína en el estómago llevó a los médicos a determinar que esa circunstancia, junto con el fortísimo calor de principios del pasado agosto, había acelerado el proceso de putrefacción.
En principio, los detenidos han sido acusados de un delito de homicidio por omisión, aunque en su declaración han mantenido, al menos algunos de ellos, que la mujer murió cuando la trasladaban en el coche a un centro médico en un municipio de Castelló, a cuya puerta pretendían dejarla para que recibiese asistencia.
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