Un agente de la Policía Local de Elche tuvo que emplear su arma reglamentaria y disparar en una pierna a un hombre que retenía a una mujer a la que impedía moverse tras colocarle un cuchillo de catorce centímetros en el cuello, y a la que amenazaba con matar haciendo caso omiso a sus indicaciones. Los hechos se desarrollaron en el interior de una tienda 24 horas, a la altura del número 16 de la calle Mariano Benlliure.
Eran las 22.30 horas del jueves cuando la mujer, de nacionalidad lituana, transitaba en dirección a su casa por la acera frente a la tienda. De acuerdo con los datos facilitados por la Fuerzas de Orden Público, al llegar a la altura del número 16 un hombre, de nacionalidad rumana, la abordó esgrimiendo una navaja. Los intentos de la mujer por escapar fueron en vano, ya que el agresor la tenía bien agarrada y le colocó el cuchillo en el cuello para que se estuviera quieta.
Fue entonces cuando el hombre, con la mujer, se dispuso a cruzar la acera para entrar en la tienda. En el interior, la empleada que en ese momento estaba de turno se percató de la situación y al ver que se dirigían al comercio apretó la señal de alarma antiatraco. También un hombre que en ese momento pasaba con el coche por las inmediaciones dio aviso a la policía al observar las amenazas con el cuchillo sobre la mujer.
Una vez en el interior de la tienda el hombre, sin soltar a su víctima, pidió a la dependienta que le proporcionara una cerveza. Ésta tuvo la suficiente sangre fría para ganar tiempo, personándose en el lugar una patrulla de la Policía Local ilicitana. Los dos agentes trataron de hacer entrar en razón al hombre para que desistiera, dejara libre a la mujer y soltara el cuchillo. Sin embargo, a cada intento de los policías por intentar tranquilizarlo y que entrara en razón se iba poniendo más y más nervioso, de acuerdo con los datos recabados por este periódico.
De hecho, en varias ocasiones, mientras se dirigía a los agentes, movió el cuchillo con gesto amenazador hacia la mujer. Mientras tanto, la dependienta de la tienda logró salir por una puerta de seguridad que hay en el local ante cualquier eventualidad.
El estado de nervios y de inquietud del hombre iba a más y uno de los agentes, que cuenta con una experiencia suficiente en función de sus quince años de servicio, y viendo que la vida de la retenida corría peligro, aprovechó un instante en el que hizo ademán de que la iba a apuñalar para dispararle en la pierna derecha. Fue un tiro limpio, según los datos facilitados por la Policía Local.
El hombre cayó al suelo entre la máquina de refrescos y la estantería en la que se encuentran los productos de repostería, momento que fue aprovechado por los agentes para liberar a la mujer y reducir definitivamente al agresor. Fue atendido en el lugar por una unidad del Samu, que posteriormente le trasladó al Hospital del Vinalopó y fue dado de alta.
La Comisaría de la Policía Nacional de Elche se ha hecho cargo del hombre, que pasará a disposición judicial. En principio los cargos que se presentan contra él son los de robo con intimidación y retención ilegal. La mujer no tenía ningún tipo de relación con el hombre, según los datos. Simplemente pasaba por el lugar equivocado en el momento equivocado.
Fueron muchos los curiosos que se acercaron a las inmediaciones de la tienda ante el despliegue policial que se llevó a cabo.
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